ERIC GENAO Y EL ARTE CREATIVO
Por Manuel Mora Serrano AND THE CREATIVE ART
Eric Genao, criollísimo, no obstante su nombre noruego, lleva sangre árabe en sus venas y aunque nació en Samana, en 1955, es un producto nacional neto por haber vivido y estudiado en San Francisco de Macorís, segunda ciudad importante del Cibao y tercera en población del país y luego quedado a vivir en Santo Domingo donde recibiera al mismo tiempo su carrera de arquitecto y la de pintor.
Viajero por Europa, en sus años de formación vivió y bebió la tradición y la revolución.
Sea por sus ancestros libaneses y la tradición musulmana de no pintar la forma humana, sea por convencimiento propio, Eric Genao ha ido hacia la esplendidez de un lenguaje personal donde el color, la limpieza del trazo y la profundidad de su decir, lo han colocado en un envidiable sitial dentro de las corrientes mas modernas del quehacer artístico en América.
La muestra que presenta en la galería San Juan Bautista es un testimonio suficiente para que los espectadores asientan que lo que sostenemos es cierto: Eric Genao es un creador personal de mundos cromáticos y es propietario de una semiología perfectamente asimilable a pesar de su profundidad lindante con la metafísica pura.
He sostenido en artículos anteriores (El atormentado y deslumbrante mundo de Eric Genao, Listín Diario, 9 de enero de 1986 y Eric Genao encuentra el resplandor, Listín Diario, 25 de julio de 1988):
“Si alguna vez es posible decir que estamos ante un arte actual, moderno en el pleno sentido, es frente a esta muestra desconcertante de calidad, de indudable calidad, que de una vez por todas coloca a su autor en la vanguardia de su país con un personal y deslumbrante mundo artístico”.
“Entrar a su muestra es entrar en deslumbrandilandia; es salir lleno de fervor, henchido de estupores. Eric ha encontrado el esplendor, ha descubierto el resplandor”.
¿Qué más puede decirse de un joven pintor? Su obra es la que tiene la palabra y al fin y al cabo, es la culminación real de todo el proceso de la creación: la obra sola, y desnuda frente al ojo del espectador; lo demás, es simple y llanamente un pacto de estupores.
Traducción
MANUEL MORA SERRANO
Doctor en Derecho y connotado escritor dominicano, actual asesor cultural del Poder Ejecutivo.
Eric Genao, very native, with an norweigan name, has arabian blood in his veins and was born on 1955 in Samana. He is an unadultucated product and having studied and lived in San Francisco de Macoris, the second most important city in the Cibao and the third most important relaying on the country´s population. He stayed in Santo Domingo, where he graduated in architecture and painting.
He traveled around Europe, and on his early years he lived the revolution and felt all the tradicions surrounding him.
Perhaps from having Lebanese ancestors and some musulman traditions, he did not like painting the human forms, Eric Genao created, juged by himself, a personal language, in which the color, the nitidness, clean strokes and his dazziness, has placed him in one of the most envied positions of the modern artistic creations of America.
The exhibition presented in the San Juan Bautista Gallery is a sufficient proof of the merits we otorgate him. Eric Genao is a personal creator of chromatic worlds, and is the owner of a perfectly adaptable semiology, even if he posseses a very intense similarity with the pure metaphysics.
I have said before in articles as: (“The tormented and astonishing world of Eric Genao”, on the Listin Diario in January 9th of 1986; and in “Eric Genao finds the splendor”, on the Listin Diario on july 25th of 1988).
“Could we possibly say that we are before the actual art, modern in all ways, and confronting the exorbitanting quality, an undoubitably quality that places the author in his country vanguard with a personal and dazzling artistic world”.
“Going in his exhibition is like entering in dazzingland: and you come out full of intense heat, and inflated with amazement”.
“Eric has found the dazziness, he has discovered the brilliantness”.
What else can you say of a young paintor? His work says it all, it is the real culmination of the creation process. His work is alone and naked to the spectators eye; and the rest is only a pact of stupors.
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